14 de Noviembre, Encuentro de Crianza. Las primeras familias van llegando y se acomodan en el espacio en ronda que preparamos con almohadones y piso de goma eva dispuesto para los pequeños. Algunos de ellos, ya exploradores recorren el salón; otros, permanecen a upa o cerca de sus papás.
El encuentro comienza y contamos de qué se trata el mismo. El objetivo de la actividad no es dictar una clase de crianza ni imponer una verdad, si no compartir experiencias y descubrir el saber que trae cada familia.
Nos presentamos y cada uno expresa las dudas que trae consigo o los temas que quisiera conversar.
En este encuentro se plantearon las siguientes temáticas:
• Miedos
• Cuerpo
• Límites
• Caprichos/berrinches
• Lactancia
• Sueño
• Estimulación (o no) en distintas etapas
• Vuelta al trabajo
• Tribus y redes virtuales
• Comunicación
• Intervención quirúrgica
• Berrinches
• Diferencias familiares entre las formas de crianza ¿Cómo respetarlas?
Algunos papás comentan ser primerizos y tener muchas dudas por ser la primera vez que tienen que encarnar esta función; otros cuentan que acuden porque, a pesar de tener otros hijos, no encuentran la manera adecuada de relacionarse con ese hijo en particular: “lo que sirvió con uno, con el otro no funciona”. De eso se trata: de reconocer la singularidad de cada niño.
Nos parece maravilloso que tanto las mamás como los papás puedan hacerse preguntas, reconocer sus miedos y compartir sus experiencias con otros que están transitando caminos afines.
Trabajamos acerca de la importancia de reconocer y asumir los miedos como parte del proceso de convertirnos en padres. Una madre preocupada respecto del llanto de su bebé se pregunta: “¿Es algo que estamos haciendo mal nosotros?” Este intercambio resulta enriquecedor ya que se explicita la angustia, la culpa o impotencia de los padres ante una situación recurrente.
Hablamos sobre las redes virtuales, la cantidad de grupos de Facebook que existen sobre temas de crianza y acerca de cómo la abundancia de información que circula, puede ser una poderosa herramienta y otras veces, el hecho de ser tan divergente y contradictoria, puede generar mucha confusión. Actualmente nos estamos enfrentando a una transformación en relación a la circulación del saber; tradicionalmente estaba centralizado en la figura del médico, que era el que “sabía” y al que se le consultaba sobre temas de la crianza. Hoy existen múltiples espacios donde los papás pueden preguntar e informarse. Internet habilita el acceso a un mundo de información que por momentos también puede volverse difícil de discernir. Reivindicamos el valor de la experiencia que tiene cada mamá y papá con sus hijos, como un lugar de producción de un saber-hacer con la crianza. A raíz de este tema, mencionamos también la importancia de las tribus de madres como red de apoyo y habilitamos el espacio para fomentar el encuentro por fuera del mismo.
Conversamos sobre lactancia, la razón de la “libre demanda” para una lactancia exitosa y la importancia de olvidarse del reloj y de los horarios estrictos.
Luego comentamos acerca de la necesidad de contacto corporal de los bebés, teniendo en cuenta el concepto de “exterogestación”, aclarando que cada bebé es distinto y necesita cosas diferentes. Por ello es fundamental estar atentos a las señales que nos brindan, leerlas e ir encontrando la manera de relacionarnos con ellos.
Trabajamos acerca de la función de la anticipación, es decir contarle al niño lo que se va a hacer, para implicarlo a él y a su cuerpo, haciéndolo partícipe activamente del encuentro. De esta manera el bebé puede anticiparse y prepararse para las cosas que le suceden.
Finalmente hablamos de la importancia de las rutinas, siempre y cuando se mantengan flexibles y no se vuelvan una trampa imposible de sortear.
Agradecemos a todas las familias que confían en nuestra propuesta y especialmente a los bebés que participaron, ellos son nuestros mayores maestros.